“RETRATO DE UNA INFANTA” Juan de Flandes
“RETRATO DE UNA
INFANTA”
JUAN DE
FLANDES 1465-1519
RETRATO DE UNA INFANTA, 1496, ÓLEO SOBRE TABLA, 31,5X22 CM MADRID MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA
PROCEDENCIA: JOAQUÍN ARTEAGA,
ECHAGÜE, DUQUE DEL INFANTADO, MADRID; 1930 COLECCIÓN THYSSEN-BORNEMISZA; 1922,
INGRESÓ EN EL MUSEO THYSSEN-BORNEMISZA, MADRID.
Desde que se descubrió la tutoría del cuadro de Jan de Flandes, se lleva dudando si representa a Juana o a Catalina, ambas hijas de los Reyes Católicos.
Por un lado, podría ser Juana, ya que, coincide un pago de Isabel la Católica el 12 de julio de 1496 en Burgos de seis mil maravedíes, a Juan de Flandes. Observamos un gran parecido físico, con el retrato de Juana en el Kunsthistoriches, museum de Viena, que por su tamaño se supone sin duda que es ella. Teniendo en cuenta que el 20 de agosto de 1496 Juana se embarcó, en presencia de su madre la reina Isabel, hacia Flandes para casarse con Felipe el Hermoso. La infanta que nació el 7 de noviembre de 1479, tendría 17 años y sería un recuerdo para su madre.
En definitiva la habilidad del pintor, manejando la luz es extraordinaria, dando un aire a la joven de indefensa y frágil. La tercera opción es la infanta María, futura reina de Portugal, nacida el 29 de junio de 1982, en el cuadro tendría 14 años, y la rosa, aquí sería símbolo de matrimonio.- Sus padres la querían casar con el rey de Portugal don Manuel, pero él prefirió a la primogénita Isabel, viuda del príncipe portugués don Alfonso, con la que se casó en 1497, muriendo al año siguiente. Entonces se casó con María en 1500.
Por otro lado, podría ser Catalina, la hija pequeña de los Reyes Católicos que nació en Alcalá de Henares el 16 de noviembre de 1485, por la rosa que sujeta entre sus dedos, que quizás aludía a los Tudor, ya que fue prometida en 1489 con Arturo, el príncipe de Gales. Con el que se casó en 1501, y el esposo murió al año siguiente. Catalina no volvió a Castilla, porque se prometió y se casó con su cuñado y futuro rey Enrique VIII de Inglaterra.
Se supone que su madre Isabel envió su pintor de corte Sittow, para retratarla. Pero los rasgos de este cuadro, actualmente en Kunsthistoriches de Viena, son diferentes a los de nuestro cuadro del Thyssen-Bornemisza, sobre todo la nariz.
Comentarios
Publicar un comentario